El "xeneize" empató 2-2 en San Pablo, sentenció la semifinal con un global de 4-2 y se medirá con River en una final de la Copa Libertadores para alquilar balcones. Arrancan el miércoles en La Bombonera.
Boca, que había dado un gran paso ganando 2-0 el partido de ida en Buenos Aires la semana pasada, también festejó este miércoles en San Pablo, al igualar 2-2 con Palmeiras para clasificarse para disputar la final de la Copa Libertadores, instancia en la que se medirá nada menos que ante River, en una definición inédita e histórica.
Será sin dudas el cruce más importante de la historia entre los dos gigantes del fútbol argentino. Con Boca intentando conquistar su séptima Libertadores y alcanzar a Independiente como el máximo ganador del torneo de clubes más importante del continente y con River tras su cuarta Libertadores, la segunda bajo el exitoso mandato de Marcelo Gallardo.
Claro que Boca, antes de pensar en el infartante cruce que se viene, tuvo que sacarse de encima a Palmeiras. Y los dirigidos por los mellizos Barros Schelotto lo lograron no sin antes sufrir algún sobresalto.
Pese a sufrir un susto en el arranque del partido -gol del local anulado por el VAR- el “xeneize” logró rápidamente el esperado gol de visitante y prácticamente sentenció la serie semifinal. Aunque en el complemento volvió a sufrir cuando antes de los 15′ Palmeiras dio vuelta el partido y quedó a dos goles de la clasificación.
El primer llamado de atención llegó cuando se jugaban 9′ y Bruno Henrique definió correctamente debajo del arco tras centro desde la derecha, en una acción que fue anulada por el árbitro a instancias del VAR, por offside de Deyverson en el arranque de la jugada.
En un trámite abierto, de rápido tránsito por el mediocampo, Boca acertó en la primera clara que tuvo, una maniobra similar a la que habían tenido los brasileños. Iban 17′ cuando Sebastián Villa recibió por derecha y buscó con un gran centro por lo bajo y con la “comba” exacta a Abila, que sólo tuvo que empujar dentro del área chica para poner el 1-0 que parecía definir la historia.
Porque ese gol de Boca obligaba al Palmeiras a tener que convertir cuatro para meterse en semifinales.
Demasiado cuesta arriba para el equipo de Scolari, que apenas contó con un par de chances claras de allí hasta el final del primer tiempo. Un cabezazo de Bruno Henrique (19′) que se fue junto a un palo y otro anticipo de cabeza de Gustavo Gómez (25′) que Rossi neutralizó bien yendo abajo junto a un palo.
Sin embargo, en el primer cuarto de hora del segundo tiempo, Palmeiras consiguió dar vuelta el partido gracias a los goles de Luan (7′) y Gustavo Gómez (de penal a los 15′) y le puso un poco de incertidumbre a la semifinal.
Y hasta estuvo cerca del tercero con el recién ingresado Borja, a los 19′ y tras una seguidilla de centros en el área visitante.
Pero Boca, como en el partido de ida, otra vez contó con el oportuno ingreso de Darío Benedetto desde el banco de suplentes para simplicar todo.
El “Pipa” entró por Abila a los 16′ y a los 25′, luego de recibir cerca de la medialuna, se perfiló para su derecha y sacó un disparo cruzado y rasante que se metió junto a un palo. Entonces sí, con el 2 a 2, Boca sentenció la serie. Palmeiras bajó los brazos y apenas esbozó una tibia reacción final. Demasiado poco para impedir la soñada final de Copa Libertadores que se viene entre River y Boca. El miércoles, en La Bombonera, será el primer capítulo de una definición de película.
La síntesis
Palmeiras 2
Weverton; Mayke, Luan, Gustavo Gomez, Diogo Barbosa; Felipe Melo, Bruno Henrique, Dudú, Willian, Lucas Lima, Deyverson. DT: Luiz Felipe Scolari.
Boca 2
Agustín Rossi; Leonardo Jara, Izquierdoz, Magallán y Olaza; Wilmar Barrios; Sebastián Villa, Nández, Pablo Pérez y Cristian Pavón; Ramón Abila. DT: Guillermo Barros Schelotto.
Goles: en el primer tiempo, 17′ Ramón Abila; en el segundo tiempo, 2′ Luan, 15′ Gustavo Gómez, de penal y 25′ Darío Benedetto.
Cambios: en el segundo tiempo, en el inicio, Moisés por Bruno Henrique, 16′ Darío Benedetto por Abila, 18′ Borja por Williman, 29′ Mauro Zárate por Pavón, 30′ Scarpa por Felipe Melo y 35′ Fernando Gago por Pérez.
Estadio: Parque Allianz.
Arbitro: Wilmar Roldán (Colombia).